ALIRIO PALACIOS SE FUE AL CIELO A DIBUJAR CABALLOS

11.09.2015 20:53

 ALIRIO PALACIOS SE FUE AL CIELO A DIBUJAR CABALOS


Rafael Rattia 

Terminando de leer la entrevista que le hizo el diario EL NACIONAL al eximio y universal pintor y admirado coterráneo Alirio Palacios, salì corriendo en volandillas tras mi laptop a emborronar estas líneas para testimoniar mi ferviente respeto y admiración por la genial obra artística de este singular deltano de aquilatada trayectoria del grabado, la escultura y la pintura que sin temor alguno y con una poco común valentía alza su voz estètica para abogar por el necesario cambio político, social y cultural de Venezuela hoy gobernada por lo que èl mismo llama “las manos de hierro” del Comandante-Presidente.
Desde hacìa un poco màs de 10 años que me había exiliado voluntariamente de mi entrañable Delta y hace unos días atrás decidì volver al Delta de mis tormentos a pasar unas cortas vacaciones. Inquirì por Alirio Palacios y por respuesta obtuve: “èl vive en Caracas, trabajando y creando su vasta obra de resonancia universal”. Cuàl no sería mi sorpresa que leyendo la entrevista antes mencionada titulada: “Prefiero dibujar caballos que los poderes públicos”. En respuestas màs bien lacónicas y fulminantes, Palacios manda al mismísimo carajo a quienes lo han tildado de “apátrida” y dice que Venezuela puede ser vista como un inmenso promontorio de chatarras rodeada de “indios hambrientos”, asesinos y delincuentes con olor a muerte. 
Alirio no pierde su paladar deltano-orinoquense; dice que sobrevive en la Capital de esta gasolinera al sur de Miami que es Caracas comiendo plátano verde con pescado guisado en coco y rie profusamente de modo hilarante para conjurar las tentaciones de la seriedad con que el poder oficial autoritario pretende encandilar a una nación que no sucumbe ni cede a la persistencia despótica de la bota militar bolivaresca. 
El periodista le inquiere sobre sus grandes vallas artísticas y el pintor replica diciendo que la belleza de sus vallas se diferencian años luces de la vallas que pueblan calles y avenidas de Anzoàtegui con Chàvez y Terek Williams Saab sonreídos como si estuvieran burlándose de esta nación llamada Venezuela. 
Piero della Francesca, Vincent Van Gogh, Armando Reveròn, representan para nuestro deltano excepcional ìconos insuperables de la màs rotunda creación artística universal; faros luminosos que alumbran los siglos porvenir de la plàstica de todos los tiempos. 
¿Admira algo de la revolución? Pregunta el periodista. 
- El acto de estar en una cadena siete horas sin pararse ni a orinar. (risas) 
Este es el prototipo del artista que necesita el país en estos tiempos aciagos y borrascosos de seudorevoluciòn y “socialismo militar”, de fascismo de “izquierda” fundamentalista y obsecuente. El momento histórico que lamentablemente vive la patria requiere de voces y sensibilidades estèticas y artísticas que honren el legado cultural que izaron en su momento personalidades de vigorosa trascendencia como Carlos Contramaestre, “el chino” Vìctor Valera Mora, Ludovico Silva, Josè “pepe” Barroeta, Elì Galindo y un largo etcétera que sería doloroso nombrar en estas líneas. 
Me complazco tanto y me enaltece sobremanera leer una postura tan digna venida de un coterráneo nativo de la “Tierra del Agua” que se empina sobre las dificultades obvias que supone disentir de la racionalidad logocràtica y tecnoburocràtica del socialismo obsidional postoncològico.